El funcionario, que mañana asistirá a la ceremonia de investidura del mandatario demócrata, a la que no concurrirá Donald Trump, consideró que están dadas “las condiciones atmosféricas propicias para la profundización de la agenda bilateral, que es amplia y está en expansión”. “Tenemos una muy positiva expectativa respecto del cambio de gobierno”, evaluó.
Si bien aclaró que hasta el momento de la asunción, los equipos de trabajo de Biden no dialogan con los embajadores extranjeros, puntualizó que una de las prioridades será la organización de una reunión bilateral entre ambos mandatarios. “La reunión entre ellos o la visita será en cuanto se pueda. El presidente Alberto Fernández aspira a tener un encuentro bilateral y lo mismo pretenden del otro lado”, aventuró.
En este sentido, recordó la conversación telefónica que mantuvieron Fernández y Biden el pasado 30 de noviembre, luego de que el estadounidense ganara las elecciones. “Habíamos acordado un diálogo de 10 minutos y para mi sorpresa hablaron 35 minutos y fue muy positivo. Yo noté una clara coincidencia en distintos aspectos de la agenda bilateral y mundial”, dijo Argüello, que acotó que fueron “muy poquitos los presidentes latinoamericanos que hablaron con Biden después de electo”.
Además, adelantó que también se podría avanzar en una reunión o diálogo entre la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y su par de EEUU, Kamala Harris, y celebró la “diversidad” anunciada por Biden en su nuevo gabinete. “Una diversidad desconocida para este país y que contrasta con el gabinete blanco y masculino de Trump”, ilustró.
Jorge Argüello también se mostró positivo de cara a la negociación que Argentina ya tiene abierta con el Fondo Monetario Internacional. “Es muy importante el rol del Tesoro de EEUU en esta negociación por el peso que tiene dentro del FMI”, explicó.
“¿Cuándo va a estar cerrada la negociación? No lo sabemos. Esperamos que lo antes posible. Yo tengo una visión positiva, creo que vamos a tener acuerdo en los próximos meses”, auguró y destacó el rol del actual ministro de Economía, Martín Guzmán, a quien definió como “un excelente timonel a cargo del barco”.
Además, si bien celebró que la Argentina ya haya resuelto la deuda con los acreedores privados, no descartó que la administración de Biden pueda establecer nuevas regulaciones a los fondos buitre. “Hay una coincidencia mundial sobre la necesidad de adoptar regulaciones, así que no lo descarto. Nosotros somos uno de los países que más los padecieron”, dijo.
Por último, señaló que gran parte de su trabajo se orientará a fomentar el comercio bilateral y las inversiones, teniendo en cuenta que “EEUU es el país que más inversiones tiene en Argentina”.
En este punto, adelantó que uno de los objetivos de su gestión será tratar de recuperar el mercado del biodiesel, cerrado durante las presidencias de Mauricio Macri y Donald Trump. “No hemos logrado volver atrás con esta medida que afecta mucho a nuestro país. Antes de 2016 exportábamos más de 1.000 millones de dólares”, añadió.
También puntualizó en el sector de los cítricos dulces como la naranja y la mandarina. “Nosotros no estamos exportando nada, a diferencia de Uruguay. Entonces, no hay razones para no trabajar para lograr ese mercado”, cerró.