Los 89 chicos que asistían a diario a la fundación Alas del Alma en el barrio Luis Piedrabuena, y que por la pandemia de coronavirus debieron reconvertir las actividades a la virtualidad, fabricaron en sus propias casas los regalos que se les entregará a cada personal del hospital Pedro Moguillansky. En los presentes irán dulces, macetas con materiales reciclados, elementos tejidos, plantas, fabricaciones en vitrofusión, y muchos más, acompañados de una foto del joven que realizó el presente y un dibujo. El objetivo es llevarle un mimo a cada hospitalario que desde la llegaba del virus no bajan los brazos para salvar la mayor cantidad de vidas posibles. 

Anahí Cárdena

“Los presentes son simbólicos, cosas pequeñas, pero que llevan mucho trabajo porque son tareas manuales. Este jueves realizamos las entregas a los sectores de pediatría y guardia y aún nos restan 30 áreas más, que lo haremos el viernes. Es una caja por área, y adentro además de los regalos van dibujos y una foto del joven que lo fabricó para que lo puedan conocer”, explicó Susana. Y Agregó que los elementos enviados cuentan con un proceso de sanitización para evitar cualquier problema.

“Desde marzo decidimos suspender las actividades presenciales y garantizar los encuentros virtuales. Nos encontramos que es el doble de trabajo, porque a las tareas grupales que teníamos ahora las transformamos en tareas individuales, pero por suerte estamos pudiendo garantizar todos los talleres sin problema gracias a la ayuda de los docentes y de las familias. Lo importante en estos momentos es que estén resguardados y contenidos”, indicó la presidenta de la fundación que ya tiene 24 años de trabajo incansable en la ciudad.

Al finalizar la actividad con el hospital, la fundación presentará un video en el que mostrará todo el proceso de fabricación de los regalos en cada una de las casas.

Damián Carrasco tiene 15 años, es uno de los chicos que asiste a la fundación y participó de las actividades. Junto con su mamá Patricia y su hermano Santiago cocinaron casi 200 galletitas, las envolvieron y las entregaron al personal de salud. Toda la receta la siguió Damián muy atento a través de una videollamada con la profe del taller de cocina.

“Hicimos las galletitas pepa con dulce de membrillo en el medio. Cocinamos 30 bolsitas con 6 galletas cada una, las envolvimos y las presentamos para sumar algo dulce a los regalos. Llevó mucho trabajo, pero a Damián le encanta cocinar. La receta se la fue explicando la profesora del taller de cocina por videollamada, y nosotros le ayudábamos”, explicó Patricia.

Toda la familia que vive en el Distrito Vecinal Noreste participó de la actividad y disfrutaron juntos de un momento agradable.

“Damián quedó muy contento al poder hacer estos regalos. La institución es muy linda, además de todas las terapias que ofrecen hay muchos talleres, y ahora como no pueden asistir continúan las actividades de manera virtual. Los chicos disfrutan mucho del lugar y de la compañía de los docentes”, contó la mujer

Fuente:  LM cipolletti