Los moldavos votaron a favor de la adhesión del país a la Unión Europea. El "sí" obtuvo una ventaja muy estrecha en el referéndum celebrado el domingo, según datos electorales. Con el 99% del escrutinio, el voto favorable a la adhesión ha superado al 'no' con el 50,39% de apoyos, lo que supone 1,4 millones de papeletas, según la Comisión Electoral Central de Moldavia.

Más de 200.000 votos emitidos desde el exterior del país han declinado la balanza, cambiando el resultado en el último momento del recuento para favorecer el camino hacia la UE. De haber ganado el 'no' habría sido un desastre político para el Gobierno prooccidental, que apoyó firmemente la campaña a favor de la UE.

La votación se realizó en medio de afirmaciones continuas de las autoridades moldavas de que Moscú ha estado llevando a cabo una 'guerra híbrida' para desestabilizar al país y descarrilar su camino hacia la UE.

La presidenta de Moldavia, Maia Sandu, denuncia la compra de votos por parte de Rusia para interferir en las elecciones y el referéndum de adhesión a la UE Las acusaciones de injerencia rusa incluyen financiación a grupos de oposición prorrusos, difusión de desinformación y apoyo a un importante esquema de compra de votos.

En la carrera presidencial que se celebró al mismo tiempo, Sandu ganó la primera vuelta con el 42% de los votos en un campo de 11 candidatos, pero no logró obtener una mayoría absoluta. Se enfrentará a Alexandr Stoianoglo, un exfiscal general afín a Rusia que superó las encuestas con alrededor del 26% de los votos, en una segunda vuelta el 3 de noviembre.

En su cuenta de X, antes Twitter, Sandu denunciaba ataques a la libertad y la democracia en su país, además de un intento de fraude electoral de grupos criminales que pretendían perturbar el proceso electoral. Sandu aseguraba que: "Moldavia ha sufrido un ataque sin precedentes contra la libertad y la democracia (...), tanto hoy como en los últimos meses.

Tenemos pruebas claras de que estos grupos criminales pretendían comprar 300.000 votos, un fraude de una escala sin precedentes. Su objetivo era socavar el proceso democrático y difundir el miedo y el pánico en la sociedad.